Solución a medida para una compañía del sector chacinero

Convertirse en un proveedor de referencia en pesaje y etiquetado y llegar a forjar con la empresa una relación duradera y de confianza requiere, según nuestra experiencia de ya más de 30 años en el sector industrial, contar con algunas habilidades. Entre ellas, mostrar siempre una gran cercanía en el trato, no olvidar que ese cliente, al igual que el resto, es único y diferente, y, sobre todo, ser capaz de ofrecerle respuestas rápidas a lo que necesita y demanda.

A esto último nos ayuda en DIBAL el hecho de disponer de un equipo propio de diseño y desarrollo de producto, profesionales con altas capacidades para adaptar soluciones estándares a requisitos muy específicos de los clientes. Un ejemplo de ello es lo que nos ocurrió recientemente con una compañía líder del sector chacinero perteneciente a un grupo alimentario internacional con 10 centros productivos en España y amplia presencia también en Europa y en el resto del mundo. Te contamos el caso de éxito.

ANTECENDENTES Y NUEVA NECESIDAD

El vínculo de DIBAL con la empresa venía de tiempo atrás, cuando hace ya más de 15 años nos trasladaron su deseo de cambiar unos indicadores de pesaje en una de sus plantas de procesado más importantes. El proveedor con el que trabajaban había cesado en su actividad y buscaban otras alternativas. Nos escogieron por el binomio calidad de producto/calidad del servicio y, a partir de ese momento, la relación se fue afianzando hasta llegar a convertirnos en su colaborador de confianza en soluciones de pesaje.

Recientemente este cliente nos comunicó que necesitaba un equipo de pesaje móvil, robusto, estanco y con unas características ergonómicas muy concretas que le permitiera llevar el control de la trazabilidad final de los jamones ibéricos en cualquier punto de sus instalaciones. La normativa del jamón ibérico establece que cada pieza es única y debe estar dentro de unos rangos de peso. Era imprescindible, además, recoger la información referente a cada pieza (el número de crotal, el ‘pendiente’ de plástico que se pone en las orejas del ganado para poder identificarlo) vía RFID y trasladarlo a su ERP para generar el informe legal correspondiente.

La solución que venía aplicando la empresa para realizar este control de la trazabilidad era totalmente manual: los operarios apuntaban la información en papel y luego la introducían a mano en el sistema, con el consiguiente riesgo de que se produjeran errores.

LA SOLUCIÓN DE DIBAL

La solución que se planteó por parte de DIBAL fue el diseño e instalación de cinco equipos móviles de pesaje con:

• Bastidor de acero AISI304 y ruedas.
• Plataforma monocélula de acero inoxidable.
• Indicador industrial VT-1200 con aplicación de pesaje.
• Impresora de etiquetas externas con cajón estanco opcional para limpieza.
• Escáner.

Desde la recepción de los requerimientos del cliente hasta la entrega de los equipos móviles en planta transcurrieron apenas tres meses. Los Departamentos de DIBAL involucrados en el proyecto fueron Comercial, Ingeniería de Producto, Producción Industrial y Servicio Técnico, y el trabajo se dividió en las siguientes fases/etapas:

1. Reunión inicial con el cliente para entender bien el proyecto, sus requisitos y las condiciones de trabajo.
2. Trabajo conjunto del equipo Comercial y de Diseño de DIBAL para la puesta en común de las necesidades del cliente y el posterior desarrollo de una propuesta inicial.
3. Presentación de la solución y revisión de la propuesta para incluir en el diseño los ajustes de máquina requeridos por el cliente.
4. Fabricación de los equipos.
5. Instalación de los equipos en los cuatro centros productivos que presentaban la necesidad.

CONCLUSIONES

Esta solución sencilla ha permitido a la empresa simplificar, automatizar y digitalizar parte de su proceso, lo que se ha traducido en un incremento de la eficiencia, en una reducción de los errores y en un mayor control de la producción. La respuesta que hemos recibido por parte del cliente ha sido, una vez más, muy positiva. De hecho, y dada la utilidad de la solución, sus responsables técnicos, por iniciativa propia, decidieron aplicar este mismo proceso de trabajo con el jamón blanco, enmarcándolo dentro de su plan global denominado ‘Blockchain’.

El proyecto ha servido para afianzar aún más la relación del cliente con DIBAL, y estamos convencidos de que vamos a continuar aprovisionándole de soluciones de pesaje, etiquetado (manual y automático) y detección de metales para sus diferentes centros de trabajo, tanto en España como en el resto del mundo.

Esta máquina fabricada a medida tiene también grandes posibilidades en la industria pesquera. Los procesos productivos son similares, con unas condiciones de trabajo exigentes en cuanto a higiene y limpieza de las instalaciones y de la maquinaria.